Con el cierre del padrón, intendentes y los dirigentes más importantes del Justicialismo entrerriano deben definir por estas horas si hay una lista de consenso o se competirá para definir quién queda como presidente del PJ provincial.
El 3 de febrero se cumplió la primera acción del cronograma que tiene como fin la realización de las elecciones el 10 de marzo. Ya cerrado el padrón, la cúpula dirigencial del PJ de Entre Ríos, que enmarca principalmente a la Liga de Intendentes y otros dirigentes de renombre deben acordar como se plantearán las elecciones internas, teniendo en cuenta el presente del partido. (Pasó de tener un papel protagonista en la provincia a dos derrotas electorales elocuentes).
Entre las figuras más importantes y que proponen una reunión urgente se encuentran los intendentes Lauritto, Rossi, Fuertes y la recientemente electa presidente de la Liga de Intendentes peronistas Rosario Romero. La intención es que se logre un consenso para evitar que se desgaste aún más el partido que ya viene hace varios años paralizado. Con unidades básicas cerradas, militantes desmovilizados y sin convocatorias a Congresos. José Lauritto suena como una figura que nuclearía varios sectores internos.
